Las circunstancias actuales, han obligado a las personas a usar mascarillas cuando están fuera de su casa, como una medida de protección y seguridad individual, ante un posible contagio de COVID-19. Pero, ¿cómo guardar la mascarilla correctamente cuando no se usa?
También surgen otras preguntas, como por ejemplo la que hace referencia a cuál es la mascarilla más segura contra el contagio. Por eso, desde Web de Salud responderemos estas y todas las demás preguntas que puedes tener debido a la situación actual generada por el virus.
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El papel de la mascarilla: su importancia
La obligatoriedad de llevar mascarilla, es un decreto de gobierno y autoridades sanitarias de la mayoría de los países del mundo, siempre en lugares públicos y exceptuando en el hogar.
Es una medida importante, sobre todo, llegado el momento, después de varios meses, en el que las medidas de confinamiento de la cuarentena se van desvaneciendo para poder mantener los estándares económicos de los países.
La mascarilla es el pilar fundamental en la reducción del porcentaje de contagio al que está sometida una persona en espacios públicos u otros, fuera de la intimidad de la casa. Por ello, saber cómo llevar las mascarilla es un acto fundamental.
Evita que las partículas de saliva de una persona infectada lleguen a otra persona. Quien lleva la mascarilla, debe tener en cuenta que por sí sola no representa la protección total del organismo, es el elemento más importante, pero también es una de las medidas de protección que forma parte de un conjunto, por ejemplo: lavarse las manos constantemente, usar guantes en sitios públicos como supermercados, medios de transporte, tiendas de ropa o mantener una distancia de un metro y medio respecto a otras personas.
La mascarilla más habitual es la quirúrgica, sin embargo, existen otras en el mercado hechas de materiales mucho más consistentes y de larga duración.
Cómo guardar la mascarilla
Independientemente del tipo de mascarilla que uses, aprender a guardarla correctamente es esencial. No hay muchas maneras de guardar la mascarilla de forma segura cuando vayas a retirarla de la cara. Sin embargo, las pocas y más saludables alternativas, garantizan que las mismas no queden a la intemperie y al alcance de agentes contaminantes.
La manera más eficaz para saber cómo guardar una mascarilla, es recurrir a los estuches especiales. Las fundas o estuches especiales para mascarillas es la forma más recomendada por los especialistas para resguardar la integridad y limpieza del complemento más importante en la actualidad. El estuche guarda mascarillas tiene un nivel de protección amplio, que contribuye a la protección y minimiza las posibilidades de riesgo.
Consejos especiales para saber cómo guardar tu mascarilla
Para colocarse y retirarse la mascarilla de forma correcta de la cara, es fundamental:
- Lavarse las manos con agua y jabón o usar gel alcoholizado.
- Evitar tocar la mascarilla mientras se lleve puesta. Si se hace, antes hay que desinfectarse las manos.
- No usar la mascarilla húmeda.
- Para retirarla de la cara, lo correcto es hacerlo desde las orejas, no tocar la parte delantera.
- El estuche solo debe tocarse con las manos limpias y desinfectadas.
Tipos de mascarilla
Una vez que sabemos cómo guardar la mascarilla, debemos entrar al detalle con sus diferentes tipos. Y es que conocer los tipos de mascarilla es fundamental, ya que hay que tener presente sus características a la hora de hacer la compra.
Estas pueden adquirirse en farmacias y tiendas especializadas. En la actualidad, y con los riesgos de salir a la calle, comprar mascarillas online se ha establecido como una modalidad por lo práctico y porque no se tiene que estar preguntando a los empleados de la tienda sobre qué mascarilla es la más idónea o más presentable, sino que, sus características, ya aparecen reflejadas y pueden ser leídas en la comodidad del hogar o directo desde el teléfono móvil.
Por tanto, a la hora de comprar una mascarilla, debemos tener en cuenta los siguientes tipos:
Mascarillas de barrera
Son las más usadas, de acuerdo a los estándares médicos. No están diseñadas para proteger riesgos graves de peligro, como, por ejemplo, la exposición ante agentes químicos y contaminantes.
Ante el coronavirus es una barrera, quizá endeble, por lo que implica que la persona sea disciplinada a la hora de garantizar su propia protección, ya que el uso de la mascarilla de barrera no implica la seguridad al 100% de la persona. Entre las mascarillas de barrera tenemos a su vez:
· Mascarillas higiénicas no reutilizables. Son de un solo uso, científicamente comprobadas y especificadas con las nomenclaturas: UNE 0064-1, para adultos, y UNE 0064-2, para niños.
· Mascarillas higiénicas reutilizables. Pueden ser utilizada por niños y adultos. Son las que se pueden elaborar en casa con materiales reutilizables y que están sujetas a normas de uso: lavado y desinfección correctamente.
Mascarillas de alta eficacia
Se llaman de alta eficacia, porque están compuestas por un filtro de micropartículas. Esta composición ayuda a evitar que la persona inhale determinados contaminantes o agentes patógenos, entre otros, aunque no tienen efectividad ante gases o vapores.
Se consideran, de mayor efectividad frente al coronavirus porque evitan la inhalación de partículas. Están organizadas por nivel: FFP1, FFP2, FFP3, esta última recomendada para aerosoles de alta toxicidad. De este tipo, las reusables solo son las que tienen marcada la letra R.
Mascarillas quirúrgicas
Es la ideal, recomendada por el sector salud, para los pacientes diagnosticados con COVID-19. Estas mascarillas evitan que los afectados puedan contagiar a otras personas. Es importante recalcar que proporcionan un porcentaje importante de resguardo porque constituye un material propicio para la protección ante salpicadura de fluidos contaminados.
Es por ello que su uso está vinculado, preferentemente, al personal que acompaña a los enfermos en las zonas de aislamiento. Su eficacia en cuanto al contagio es parecida al de las mascarillas de barrera, aunque las quirúrgicas sean de mayor nivel en cuanto a protección, es decir, es un instrumento complementario entre las medidas que debe adoptar una persona para protegerse de manera eficaz.
Y aquí concluye nuestro artículo. Esperamos haberte ayudado a saber cómo guardar tu mascarilla correctamente y conocer los distintos tipos. Recuerda que guardar tu mascarilla con seguridad es esencial para mantener tu higiene y a la de los demás frente al virus.
