Hay muchas discusiones sobre la dependencia emocional en la sociedad actual y hoy en Web de Salud vamos a resolver todas las dudas.
Usualmente usamos este término para referirnos a personas que se sienten extremadamente renuentes a dejar una relación tóxica por el miedo al abandono.
Por lo general, asociamos este comportamiento con una pareja, donde un miembro es dependiente y el otro es el importante. Sin embargo, este no es el único tipo de desequilibrio emocional, existen varios tipos de patologías relacionadas con la dependencia.
Este patrón de dependencia emocional es de larga duración y se repetirá en las diferentes relaciones que se establezcan en la vida del individuo y, a diferencia del trastorno de personalidad dependiente, sólo aparecen en el ámbito de la relación de pareja.
El objetivo de crecer como ser humano no es ser completamente «independiente», sino establecer una interdependencia saludable con otras personas (socios, amigos, comunidades, etc.).
Contenidos
- 1 Causas de la dependencia
- 2 Síntomas de la dependencia emocional
- 2.1 Idealización del otro
- 2.2 Te quedas en la relación a pesar del daño
- 2.3 Necesitas mantenerte en contacto con la persona de la que dependes.
- 2.4 Síndrome de abstinencia
- 2.5 Vas perdiendo el entorno social
- 2.6 Temor a ser abandonados o rechazados por la pareja
- 2.7 Buscas dejar la relación sin tener éxito en el intento
- 2.8 Miedo a la soledad
- 2.9 Autoestima baja
- 2.10 Dificultad para la toma de decisiones
- 2.11 Necesidad de agradar
- 2.12 Renuncia a su autonomía
- 2.13 Sentimientos de vacío, preocupación y culpa
Causas de la dependencia
A nivel cultural en el mundo occidental existe una construcción de relaciones de pareja basada en un falso mito del amor romántico que deriva en la dependencia emocional y en el que se incita al sacrificio y al sufrimiento para lograr cumplir con las necesidades del otro y sin el cual se convertirían en seres infelices e incompletos.
Sobre este falso mito se han construido ideas sobre la confianza completa en el otro, como pensar que debes estar con una persona en la que hay que confiar cien por cien y deben saberlo absolutamente todo el uno del otro, lo que deriva a un estado de paranoia y control que conduce a celos y que paradójicamente se puede transformar en desconfianza.
Algunas creencias han sido fundamentadas en este mito, tales como que amar significa querer estar juntos en todo momento o que los intereses, metas y valores personales son los mismos que los de la otra persona y que hay que estar siempre de acuerdo en todos los aspectos vitales.
Desarrollo de una autoestima condicionada al entorno
Cuando una persona sufre de dependencia emocional, este tipo de problema ataca también a la autoestima del individuo.
Los dependientes emocionales suelen basar su autoestima a través de su entorno, esto quiere decir que si a través del entorno ve reforzada su autoestima, el individuo sentirá el incremento de su autoestima; pero, si en caso contrario el entorno no ofrece ese refuerzo positivo, el individuo perderá su autoestima completamente.
El apego en la infancia
Este punto se refiere a que durante la infancia no se llegaron a desarrollar por completo las habilidades de independencia y autonomía personal, lo que conlleva al desarrollo de la dependencia emocional. Quiere decir que las figuras del padre y la madre no fomentaron los vínculos familiares necesarios para establecer relaciones saludables.
Falta de afecto
Esto se relaciona con el anterior, en el que las personas más importantes no cumplieron con las necesidades emocionales de la infancia. Y en el caso en que hubiese retribución emocional pudo deberse a la realización de las expectativas de otras personas sobre el niño, por lo que recibir afecto quedaría condicionado a la adaptación de los deseos de los demás.
Síntomas de la dependencia emocional
Idealización del otro
Alguien que sufra de esta dependencia puede llegar a crear la imagen de una pareja ideal. En la imagen mental que crearon, sobreestiman las virtudes y eliminan las deficiencias que otros pudieran mostrar.
Te quedas en la relación a pesar del daño
Puedes verte involucrado en la dependencia emocional incluso si eres consciente de las consecuencias nocivas que puede tener para la salud, como el tener que soportar la crítica continua, el desprecio, la indiferencia, etc. Sigues buscando que exista esta conexión y puedes volverte cada vez más dependiente con el tiempo.
Necesitas mantenerte en contacto con la persona de la que dependes.
Esta actitud conduce a un control constante sobre la vida del otro. Por tanto, el «amor» se torna en «necesidad». Es normal querer compartir tus logros con los demás, pero en el caso de la adicción emocional, el consentimiento es fundamental, necesario para dar a estos logros el valor que tienen, de lo contrario, puedes pensar que has fracasado incluso teniendo el triunfo en la mano.
Síndrome de abstinencia
La persona emocionalmente dependiente puede llegar a desarrollar síndrome de abstinencia y por lo tanto sufre ante cualquier separación, ya sea permanente o temporal, por ejemplo, cuando la otra parte se dedica a actividades personales como salir con amigos o trabajar.
Esta constante comunicación se realiza por parte del dependiente como una forma de garantizar que se mantenga en contacto entre sí a pesar de la ausencia y para calmar la ansiedad causada por la separación.
Las áreas fuera de la relación a nivel de desarrollo laboral, sociabilidad y ocio van perdiendo prioridad hasta centralizar todo tu tiempo y esfuerzo para estar con la pareja.
Temor a ser abandonados o rechazados por la pareja
Para evitar este posible sufrimiento relacionado al abandono, el dependiente emocional se vuelve sumiso, ya que consideran que si pueden adaptarse para satisfacer los deseos y necesidades del otro, este no los dejará o rechazará.
Buscas dejar la relación sin tener éxito en el intento
En ciertas ocasiones puede que llegues a considerar dejar la dependencia emocional con la otra persona, pero muchas veces los intentos de hacerlo no son suficientes para terminar definitivamente la relación, por lo que esta se puede restablecer.
Miedo a la soledad
La soledad para las personas emocionalmente dependientes puede conllevar a un estado depresivo o angustioso, por lo que se aferrarán a las personas de las que dependen. Esto confirma que una relación rota puede significar el comienzo de una nueva.
Por lo tanto, las personas con dependencia emocional no pueden vivir y disfrutar la vida por sí mismas, necesitan vivir y disfrutar la vida con alguien más.
Autoestima baja
Para aquellos que sufren de dependencia emocional, pueden verse a sí mismos bajo la lupa de una baja autoestima y consideran que lo que otros piensan de ellos es más válido que lo que puedan tener como autoimagen.
Su relación, en el caso de tener una pareja, es su fuente autoestima, en la medida en que tienen una relación sienten que su valía personal aumenta. Sin embargo, a medida que desarrollan una actitud sumisa, su autoestima se deteriora.
Dificultad para la toma de decisiones
Los dependientes tienen dificultades para tomar decisiones en correlación con las relaciones interpersonales. Suelen delegar el poder de decisión en otros.
Necesidad de agradar
Para ganarse la aceptación de los demás, se adapta y asume las necesidades, opiniones y deseos de los demás, en lugar de mostrar su propia personalidad, pero colocándola en un papel secundario, sin importancia.
Renuncia a su autonomía
En este tipo de relaciones se pierde la autonomía. En todas las relaciones existe una cierta disposición a entablar relaciones con personas ajenas a la pareja, pero las personas emocionalmente dependientes lo abandonan todo, la familia y los amigos, sus planes y necesidades, porque consideran que ya no son importantes en correlación a los de la pareja.
Sentimientos de vacío, preocupación y culpa
La persona dependiente se siente vacía y desesperanzada si no está con su pareja, por lo que la pérdida del ser querido es una preocupación constante en su vida y están atentos para poder percibir las señales de alerta que pueden significar una posible ruptura y así evitar que suceda.
Si sientes que puedes estar involucrado en una relación con dependencia emocional, es importante que acudas a un especialista con el que puedas sentirte cómodo durante las sesiones, ya que esta terapia involucra procesos con un coste emocional elevado y requiere que el paciente se sienta acompañado.
Esperamos que el artículo te haya servido de ayuda, si es así, no dudes en compartirlo en tus redes sociales.