técnica RCP

Si te preguntas qué es la técnica RCP y cómo puede ayudar en la resucitación cardiopulmonar, has llegado al lugar adecuado. En Web de Salud queremos ofrecerte todos los detalles de esta técnica, desde su definición hasta su funcionamiento, pasando por los diversos aspectos en los que resulta vital.

¿Qué es la técnica RCP?

La técnica RCP, conocida como reanimación cardiopulmonar, es una técnica basada en la combinación de compresiones pectorales (apretar el pecho contra el corazón) y respiraciones de rescate (realización del boca a boca).

Este método puede salvar vidas, ya que se usa en situaciones de emergencia, como un ataque cardíaco o un ahogamiento, cuando una persona deja de respirar o su corazón para de latir. La técnica RCP ayuda a que llegue al cerebro sangre rica en oxígeno y que se vuelva a retomar la respiración.

Por ello, en los centros de enseñanza de FP a distancia y presencial, se insiste mucho en el aprendizaje de esta técnica tan importante y no solo su obligatoria memorización y práctica presencialmente. También en grados a distancia como los que se incluye en la rama de salud de Océano Atlántico y en muchos centros más.

Cómo ayuda la técnica RCP en la resucitación cardiopulmonar

La técnica RCP puede ayudar a gente que se encuentra en situaciones de emergencia, como por ejemplo las expuestas a continuación:

  • Accidentes
  • Intoxicaciones
  • Ahogamientos
  • Asfixia
  • Infartos o ataques al corazón
  • Sobredosis
  • Síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL)
  • Inhalaciones de humo
  • Lesiones por electrocución

Si te preguntas cómo ayudar con la técnica RCP, debes saber que cuanto antes se inicie, más eficaz es. Se debe hacer cuando el corazón de la persona deja de latir (no tiene pulso) o deja de respirar.

Funcionamiento de la técnica RCP

Si no estás seguro de cómo hacer la técnica RCP o en el momento preciso te inundan los nervios y el miedo, recuerda que siempre es mejor intentarlo que no hacer nada. La diferencia entre hacer algo y quedarse parado se resume en la vida de una persona.

En líneas posteriores encontrarás algunos de los consejos lanzados desde la Asociación Estadounidense del Corazón:

Si eres una persona sin formación o no capacitada. Si nunca has recibido lecciones sobre la técnica RCP o no estás 100% seguro de poder hacer respiraciones de rescate, céntrate en efectuar solo RCP con las manos. Tendrás que realizar alrededor de 100 y 120 compresiones por minuto en el pecho sin interrupción hasta que llegue la ayuda médica. Si lo prefieres, puedes llamar antes al 911 o a un número local de emergencias para recibir ayuda e instrucciones del operador hasta que la ambulancia llegue.

Si eres una persona capacitada y lista para actuar. Antes de realizar cualquier cosa, comprueba si hay pulso y respiración. Si después de 10 segundos no hay ninguna de las dos, comienza haciendo 30 compresiones en el pecho como reanimación cardiopulmonar antes de realizar 2 respiraciones de rescate.

Estas recomendaciones son válidas para situaciones de emergencia en adultos, niños y bebés, pero no para recién nacidos (hasta cuatro semanas de edad). Realizar la técnica RCP puede conseguir la circulación de sangre con oxígeno hacia el cerebro y demás órganos hasta que el ritmo cardíaco normal se estabilice por un tratamiento médico de emergencia.

Cuando el corazón se paraliza, el cuerpo ya no recibe sangre oxigenada y esta falta puede causar daños cerebrales graves en tan solo unos minutos.

Las tres partes de la técnica RCP

Nos encontraremos con tres partes primordiales dentro de la técnica RCP: compresiones, vías respiratorias y respiración:

  • Compresiones. Gracias a las comprensiones pectorales, la sangre puede volver a circular camino al corazón, cerebro u otros órganos. La reanimación cardiopulmonar comienza con 30 comprensiones pectorales, las cuales deben ser rápidas, fuertes y hechas en el centro del pecho.
  • Vías respiratorias. Después de las 30 comprensiones, debemos comprobar si las vías respiratorias de la persona en apuros están despejadas y abiertas, porque si hay algo que las obstruye, debemos quitarlo para que el aire pueda llegar desde la boca hasta los pulmones.
  • Respiración. Las respiraciones de rescate se realizan tras los dos pasos anteriores, una vez despejadas las vías respiratorias. Estas se hacen introduciendo aire por la boca o por la nariz de la víctima con el objetivo de que llegue a sus pulmones.

compresiones toracicas

Pasos a seguir de la técnica RCP

La Asociación Estadounidense del Corazón (American Heart Association) utiliza las letras C-A-B para ayudar a las personas a recordar los pasos a seguir en la técnica RCP y es utilizada en ciclos formativos de grado medio y superior para enseñar las pautas a realizar de forma totalmente segura.

  • C: Compresiones (“compressions”)
  • A: Vía respiratoria (“airway”)
  • B: Respiración (“breathing”)

Compresiones: devolver el riego sanguíneo

Tendrás que usar tus manos para realizar compresiones con fuerza y rápidamente sobre una zona específica del pecho de la víctima. Estamos ante la parte más importante de la reanimación cardiopulmonar, por ello, es recomendable que sigas al pie de la letra los siguientes puntos:

  1. Recuesta a la persona con su espalda sobre una superficie firme.
  2. Arrodíllate cerca de su cuello y hombros.
  3. Coloca la parte inferior de tu palma de la mano sobre el pecho de la persona, justo entre los pezones.
  4. Pon tu otra mano sobre la que ya tienes en el pecho.
  5. Mantén tus codos estirados y fija tus hombros encima de las manos.
  6. Presiona hacia abajo el pecho hasta que lo hundas al menos cinco centímetros, pero no más de seis centímetros. Utiliza todo el peso de tu cuerpo y no solo tus brazos cuando hagas compresiones.
  7. Continúa presionando con firmeza durante las 100-120 compresiones por minuto al ritmo de la canción “Stayin’ Alive”.
  8. Deja que el pecho retome su posición inicial tras cada compresión

Vías respiratorias: liberarlas y abrirlas

Tras realizar las 30 compresiones de pecho y, si te encuentras capacitado, abre las vías respiratorias de la víctima para realizar posteriormente las respiraciones.

Inclina la cabeza del afectado y levántale el mentón. Posteriormente, coloca la palma de tu mano sobre su frente para inclinarle suavemente la cabeza hacia atrás. Luego, con la otra mano, desliza su mentón para abrir las vías respiratorias.

Respiración: proveer aire a la víctima

La respiración de rescate puede ser de dos formas, tanto boca a boca como boca a nariz. Las actuales recomendaciones establecen que se debe realizar la respiración de rescate con un dispositivo con bolsa y mascarilla con un filtro de aire de alta eficiencia (HEPA).

  1. Si vas a relazarle la respiración boca a boca, apriétale las fosas nasales. A la vez, cubre su boca con la tuya haciendo un sello e introduciéndole aire.
  2. Proporciona la primera respiración de rescate y vigila si se le eleva el pecho.
  3. Si se le eleva, realiza la segunda respiración.
  4. Si no se eleva, repite la maniobra de inclinación de la cabeza y levantamiento de mentón para, de nuevo, realizar una segunda respiración
  5. 30 compresiones pectorales y dos respiraciones se consideran un ciclo. Realízalos de forma ininterrumpida hasta que llegue la ayuda médica o la persona necesitada retome la respiración o el pulso de forma notable.

reanimación cardiopulmonar

Esto es todo lo que debes saber sobre la técnica RCP y su intervención en la resucitación pulmonar. Si este artículo te ha servido de ayuda, compártelo en tus redes sociales.